domingo, octubre 31, 2004
Podria ser peor
Estoy enfermo.
Estoy en paro.
Voy el otro día al médico y me dice que a lo mejor es que tengo tuberculosis. Hombre, cómo que tuberculosis. A mí la tuberculosis me suena a escritores malditos agonizando en balnearios prusianos. Vamos, algo completamente innecesario y pasado de moda. No me hubiera importado ser tuberculoso en el siglo dicinueve, visitar prostíbulos parisinos y dedicarme a la bohemia y la propia consumición de un organismo deteriorado. Pero ahora no me viene nada bien. No concuerda con mi estilo de vida.
En fin, que no es un buen momento para mí. En cambio, para empezar un blog me parece un momento estupendo.
Me han hecho la prueba de la tuberculosis. Te pinchan y te meten nosequé. Te pintan un circulito en el antebrazo alrededor de dónde te pincharon y al cabo de setetenta y dos horas según lo que te ha salido lo tienes o no lo tienes.
De momento, este weblog será como la prueba de la tuberculosis. Me pincharé y veré durante unas cuantas horas qué es lo que sale.
Estoy en paro.
Voy el otro día al médico y me dice que a lo mejor es que tengo tuberculosis. Hombre, cómo que tuberculosis. A mí la tuberculosis me suena a escritores malditos agonizando en balnearios prusianos. Vamos, algo completamente innecesario y pasado de moda. No me hubiera importado ser tuberculoso en el siglo dicinueve, visitar prostíbulos parisinos y dedicarme a la bohemia y la propia consumición de un organismo deteriorado. Pero ahora no me viene nada bien. No concuerda con mi estilo de vida.
En fin, que no es un buen momento para mí. En cambio, para empezar un blog me parece un momento estupendo.
Me han hecho la prueba de la tuberculosis. Te pinchan y te meten nosequé. Te pintan un circulito en el antebrazo alrededor de dónde te pincharon y al cabo de setetenta y dos horas según lo que te ha salido lo tienes o no lo tienes.
De momento, este weblog será como la prueba de la tuberculosis. Me pincharé y veré durante unas cuantas horas qué es lo que sale.
